Posturas radicalizadas (personas y partidos) para imponer sus ideas sobre el conflicto vasco. Expansión de medias verdades en los medios de comunicación y confusión entre personas de buena fe de distintas ideologías para conocer de verdad el conflicto vasco. El conflicto es una realidad muy anterior a ETA. Su desaparición, totalmente necesaria humana y estratégicamente, no solucionará el conflicto. Surgirá otra vez tarde o temprano. Una mayor preparación de la juventud para crear una mayor y mejor disposición al diálogo sin tener intereses partidistas o ideologías. La disposición de la ciudadanía a participar en la resolución de un conflicto muy antiguo que los políticos no han sido capaces de resolver. Crear foros.