Trabajo en equipo, aunar fuerzas, si realmente queremos la paz debemos involucrar a todo nuestro pueblo y caminar en la misma dirección al margen de lo que pueda pensar cada uno. No dejar la negociación y las decisiones solo en manos de partidos, dar también la voz al pueblo. Cambio de actitud individual, cada uno es responsable de lo que vivimos, escuchar, empatía, pensar en por qué el otro actúa como lo hace. Estrategia defensiva no, no empezar el diálogo desde la postura de tengo razón, flexibilidad. Estar dispuestos y abiertos al cambio. No podemos ver a los otros como adversarios.